¿Qué es APOSTASÍA?
La apostasía es el abandono o retiro
de la fe cristiana por parte de alguien que la profesaba
anteriormente. En el Nuevo Testamento el término griego apostasía solo aparece
en dos pasajes, Hechos 21:21 y en 2 Tesalonicenses 2:3, donde se enseña que
antes de la venida del día del Señor habrá una rebelión contra Dios, un
abandono de la fe. En el lenguaje bíblico se puede describir la apostasía como
un volver atrás y no seguir a Jesús (Juan 6:66), o como renegar o
abandonar la fe (1ª Timoteo 4:1),
o ser arrastrado por el error (2ª Pedro 3:17) y como apartarse del Dios
vivo (Hebreos 3:12). Las consecuencias de la apostasía son nefastas y se describen
en Hebreos 6:4-8 y 10:26-29. Para no caer en el peligro de la apostasía la
Escritura nos motiva a perseverar hasta el fin (Mateo 24.13; Lucas 8.15), estar
firmes y retener la doctrina de Cristo (2ª de Tesalonicenses 2.15), retener la confianza
en Dios (Hebreos 3.14), y resistir al diablo (1ª de Pedro 5.9) en la confianza de
que Dios fortalece a su pueblo frente a las adversidades que pueden llevarlo a
la apostasía (1 P 5.10; 2 Tesalonicenses 2.16, 17).